21 abr 2021

Certamen literario: Cuentos para pensar sobre el racismo


El pasado 15 de marzo nuestro alumnado participó en el Certamen literario: Cuentos para pensar sobre el racismo, creado por la Fundación Fair Saturday y con la colaboración del Ayuntamiento de Huelva. Éste tiene como objetivo fomentar la reflexión acerca de diferentes problemáticas sociales a través de su creatividad literaria. Destacar que los cuentos que han resultado ganadores han sido premiados con una dotación económica destinada a un proyecto social, en nuestro caso, al proyecto ''Un Nuevo Horizonte para mi barrio", así como una mención especial. Además, ambos premios se acompañan de un diploma de reconocimiento. 

Los cuentos galardonados serán publicados en un libro recopilatorio, recibiendo todos los premiados un ejemplar del mismo. Asimismo, todos los centros adscritos y los premiados del concurso recibirán un diploma de participación. Muchas gracias por vuestra colaboración y enhorabuena a los premiados. A continuación, se recopilan los relatos participantes.

EL COLOR DE KELLY

MLAA – 4ºEPO

 

Había una vez una niña llamada Kelly, era nueva en la ciudad Huelva. Viene de África, concretamente del Congo. Se vino con su familia huyendo de la guerra, perdió a sus hermanos Daren y Sofía.

Era una niña bastante agradable y simpática. Lo que más le gustaba hacer era patinar. Le apuntaron a patinaje artístico.

Como era negra todo el mundo se reía de ella. En el colegio le pasaba lo mismo, Kelly llegaba a casa avergonzada de ser negra.

Antes de mudarse su madre le dijo: si se meten contigo por tu color de piel, no les hagas caso, tú eres así y eres la persona más agradable que he conocido en mi vida. Seguro que alguien te va a aceptar tal y como eres de hermosa.

Al día siguiente, intentó que al menos alguien la aceptara y quisiera ser su amiga. Conoció a una niña llamada Emily, era una niña muy amigable y valoraba las cualidades de las personas como Kelly, porque decía que cada persona es única y eso es lo que hace que nos diferenciemos. Y así se hicieron amigas para siempre.

Al cabo de los años Kelly se dio cuenta de que daba igual que fuera negra. Su mejor amiga la iba a aceptar del color que fuese.

 

 

 

LA NUEVA VIDA DE AKAME CHI

FMF – 4ºEPO


Érase una vez, una niña que se llamaba Akame Chi (Luna) que vivía en Gansu (China) con sus padres Whoang Chi y Shang Chi. Como en Gansu eran bastante pobres, con el dinero que les quedaba se fueron  a vivir a Francia para poder llevar una vida mejor. Trabajaban en su propia tienda 24 horas, Le bazar du Chi (El bazar de los Chi) y, en tres meses, ya tenían dinero para apuntar a Luna a la escuela.


En su primer día de escuela los demás niños no querían acercarse a ella y, obviamente, se entristeció. Siguieron avanzando los días y sus compañeros se dieron cuenta de lo lista y persistente que era Luna, así que algunos se fueron haciendo amigos suyos.


Días después con ayuda de sus amigos, profesores y padres crearon una organización para ayudar a niños pobres, enfermos o que sufren algún tipo de discriminación cada día. Y Luna pese a su poco dinero, pocos amigos y con la sensación de echar de menos su hogar, ella era feliz. Pensaba: tengo poco pero tengo todo lo que necesito. Comparado con lo que tienen muchos me siento afortunada.

 

 

UN PELOTAZO DE CUENTO

AFM – 3º EPO

 

La historia que os cuento sucedió en un colegio. Todo empieza cuando llegó un compañero nuevo llamado Martín. Este chico procedía de Mali, un país del continente africano. Debido al color de su piel, todos sus nuevos compañeros lo veían diferente y por este motivo no hablaban con él. Además, había alumnos que incluso los insultaban y se reían de él. El que peor se comportaba era Arturo, que era el delegado de clase y el que debía de dar ejemplo al resto de sus compañeros. Lo que no sabían Arturo ni el resto de los chicos y chicas de la clase, eran todos los malos momentos que había sufrido Martín antes de llegar a nuestro país. Entre otras cosas tuvo que huir con sus padres de su tierra debido a una guerra en la cual falleció parte de su familia.

 

La maestra intentaba por todos los medios que los alumnos trataran con mucho respeto al chico recién llegado, aunque delante de ella no le insultaban, en el recreo seguían haciéndolo, siempre liderados por el mismo chico, Arturo. Pasadas unas semanas la situación seguía siendo la misma, pero sucedió algo que hizo que todo cambiase.

 

Un día a la hora del recreo y como era costumbre los chicos y chicas de la clase de 3º B salían disparados hacia las pistas de deporte donde jugaban hasta la hora de regresar a clase. Pues bien, lo que sucedió fue que en la cancha de al lado estaban jugando unos alumnos de 5º curso y sin querer uno de ellos chutó un balón de fútbol con mucha fuerza, dándole en la cara a Arturo. El balonazo hizo que se cayera de espaldas y que le sangrara la nariz. Los compañeros empezaron a reírse y ninguno fue capaz de ir a ver cómo se encontraba. El único que se preocupó por él fue Martín, que, ayudándole a levantarse, le dio un pañuelo de papel para que se limpiara la sangre y le acompañó al médico.

 

Arturo no sabía ni qué decir porque el chico con el que tanto se metía fue el único que lo ayudó. Martín demostró con aquel acto mucha más comprensión y respeto del que había recibido. Desde aquel día ningún compañero volvió a ofenderlo nunca, y de eso se encargaría el delegado de clase, su nuevo mejor amigo, Arturo.

 



¿ME MIRAS?

PGM – 2ºESO


 

Ya me habían contado que alguien diferente iba a venir. Cuando me dijeron diferente pensé, ¡vaya tontería! pues todos somos igual de diferentes, y eso, nos hace únicos.

 

Llegó tarde, se notaba cansado y disperso. No lo conocía, pero a la vez, mi subconsciente murmuraba como él sería y yo lo creí. Por ello, le dediqué mi más influenciada mirada, una mirada fría, distante, a la par que curiosa y arrolladora. Él, sorprendido por mi repentina atención, me devolvió su mirada, y me sorprendió, tan bella, tan profunda, tan sincera, tan diferente… Su mirada penetró en mí y me llenó de vida, pero a la vez, me arrebató, de un plumazo, una parte de mi ser que, hasta entonces, no parecía podrida, tal y como las olas arrojan la arena mojada de la orilla.

 

Siempre había pensado que él era inaudito, extraño, nuevo, recóndito… Pero en aquel instante, su mirada calló e hizo desaparecer todo lo que, por aquel entonces, mi más fiel entorno había construido en mí, haciendo que, mi razón, no pudiese escapar del agujero de susurros mal contados en el que se había metido.

 

Mientras estos pensamientos convertidos en arrepentimientos rondaban mi cabeza, yo aún seguía contemplando su mirada, que parecía teñirse de colores que acariciaban mi alma y me gritaban lo que siempre soñaba con conseguir: ser sin miedo.

 

Entonces paró de mirarme, agachó la cabeza y esperó a ser juzgado por las mentes preparadas para lanzar sus prejuicios infundados a toda costa, sin dejar pasar un ápice de lo bueno que podría estar por llegar; en aquel infame, pero común momento, sólo me dediqué a buscar en mí lo que hacía de él alguien tan increíble e injustamente repudiado, pues llegar a ser tan personal, sincero y orgulloso de mi ser, fue, desde entonces, mi mayor meta.


Por cierto, me llamo inclusión y soy del mundo.

 


TODO SE PUEDE

MDH – 1ºESO



Esta es la historia de Karim. Karim es un niño marroquí de 10 años, que vive con su familia en Francia.


Karim es un niño normal, como cualquier otro niño, solo que su color de piel es diferente.

Allí iba a un colegio público en la ciudad de Lyon. Desde su primer día, no le gustó mucho, porque le miraban raro. Llegaba a su casa desilusionado, decía que solo había franceses y él quería niños con sus mismas costumbres, pero sus padres no podían cambiarlo a otro colegio porque no tenían dinero suficiente.

 

Él no hacía nada en especial para que lo evitaran, pero notaba que sus compañeros no se le acercaban.


Pasaron algunos años y ya estaba en secundaria, cuando llegaron ``extranjeros´´ al colegio como él. Hizo un amigo que se llamaba Abdulaye o Abdú, como le decían sus amigos.


Él y Abdú se propusieron entrar en las categorías inferiores del equipo de fútbol del Olimpique de Lyon y lo consiguieron.

 

Fueron a jugar su primer partido contra el Marsella, iban muy ilusionados, pero cuando llegaron al campo de fútbol vieron como los padres del equipo contrario fueron al árbitro a quejarse de como ``esos´´ podían jugar. El árbitro no les echó cuenta y procedió con el partido, su equipo ganó, y él y su amigo Abdú hicieron la jugada perfecta y metieron el gol que dio la victoria al equipo. Pero eso a los rivales no le gustó. Y al acabar el partido los jugadores del otro equipo insultaron y apalearon a Abdú, hasta tal caso que tuvo que ser ingresado en el hospital. Pero a Karim esa mala experiencia, le sirvió como motivación para cumplir su sueño de ser futbolista.

 

A los dieciséis años de edad, Karim se inscribió en las categorías inferiores del Olimpique de Lyon, donde hizo amigos nuevos y se lo pasaba genial, pero a medida que iba avanzando de categoría muchos ultras de otros equipos le increpaban a él y a sus amigos, incluso llegó a ver pancartas de: ``el fútbol no es para vosotros´´, refiriéndose a Karim y sus compañeros extranjeros, y eso no le gustaba.

 

Él empezó a jugar en el primer equipo, y allí sí que le hicieron mucho desprecio a él y a algunos compañeros. En las redes sociales no paraban de hacerle comentarios como que dejara el fútbol, que se fuera a su país, incluso recibió amenazas.

 

Pero él siguió en su empeño en ser jugador profesional de fútbol y puso tanta dedicación y esfuerzo, que llegó a ser titular indiscutible de su equipo.

 

Con el tiempo llegó a ser uno de los mejores jugadores del mundo, demostrando que da igual el color de tu piel, con esfuerzo todo se consigue.

 

 

 

El juego de los detectives

Hola chicos/as. Os propongo la primera historia para resolver. Recordad que solo pueden realizarse preguntas que sean respondidas con sí o no. Asimismo, si el contenido de la misma no es relevante para descifrar el enigma se responderá que carece de importancia. 

¡¡¡Ánimo y mucha suerte!!!


200 habitantes: Francesca es la culpable

En la isla de Capraia solo viven 200 personas. Tres de ellos son carabinieris que investigan robos en las viviendas. Tras tener serias dudas, recurren al grupo de investigación ''Creativity'', después de imputar a toda la población. El grupo pide una lista con horarios, usos y costumbres de todos los habitantes. Cuando llegan a la isla interrogan a Francesca y confirman que es culpable. ¿Por qué?

Carabinieris: organismo de seguridad italiano.